lunes, 29 de junio de 2015

La media veda comienza el 15 de agosto en Castilla y León

Castilla y León

La media veda comenzará en Castilla y León el próximo 15 de agosto y se prolongará hasta el 20 de setiembre, según la orden anual de caza que publica hoy el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), que introduce novedades en cacerías colectivas.

29/06/2015 | La Vanguardia
Las fechas concretas de la media veda para cada una de las provincias se concretarán en el Bocyl a través de una resolución de la Dirección General del Medio Natural, según ha detallado hoy la Consejería de Fomento y Medio Ambiente en un comunicado de prensa.

Para la tórtola común y la paloma torcaz se retrasa el comienzo de la época hábil al 22 de agosto, hasta que concluya el período de cría de estas dos especies.

En cuanto a la temporada general para la caza menor comenzará el cuarto domingo de octubre y finalizará el último domingo de enero.

En caza mayor, la temporada montera se extenderá desde el domingo, 27 de septiembre, hasta el domingo, 21 de febrero de 2016, con lo que coinciden las fechas de aprovechamiento en cacerías colectivas -monterías, batidas o ganchos- tanto del jabalí como del ciervo o del lobo.

En el caso del lobo, cualquier acción de caza requerirá autorización expresa del servicio territorial de medio ambiente. Los recechos de ciervo, al igual que los de corzo, podrán realizarse desde el 1 de septiembre.

La orden de caza simplifica y reduce las cargas administrativas en materia de cacerías colectivas, de manera que solo requerirán autorización del servicio territorial de medio ambiente las monterías o batidas/ganchos que se desarrollen en cotos incluidos total o parcialmente en el ámbito de aplicación del decreto de 1990 por el que se aprobó el plan de recuperación del oso pardo, o bien en los casos que se solicite la caza del lobo.

En estos dos supuestos, para que la cacería se considere autorizada, deberá mediar resolución expresa del servicio territorial.

El resto de cacerías se someten al régimen de comunicación, es decir, siempre que el interesado presente en registro la documentación requerida con una antelación mínima de diez días, el ciudadano quedaría autorizado sin necesidad de recibir autorización expresa.

Tanto para la solicitud como para la comunicación los ciudadanos deberán utilizar preferentemente los modelos de impreso que aparecen publicados como anexos a la orden.

Una de las novedades más significativas es la posibilidad de que en las cacerías colectivas el organizador pueda colocar los puestos en zonas de seguridad, tales como caminos de uso público no asfaltados, vías pecuarias y cauces o márgenes de ríos de menos de tres metros de anchura.

En estos casos, según las mismas fuentes, el solicitante debe hacerlo constar en la documentación remitida a la administración, debiendo cumplir con el requisito de señalización adecuada, advirtiendo sobre la realización de la montería, gancho o batida.

Respecto a la utilización de zonas de seguridad de forma ordinaria, como por ejemplo en la caza menor al salto, el titular cinegético deberá hacerlo constar en su plan cinegético, debiendo aportar una declaración responsable que refiera consentimiento del titular de dicha zona de seguridad.

También se actualiza la orden 13 de junio de 2011 de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente sobre el sistema de precintado de piezas de caza mayor para el control de la ejecución de los planes cinegéticos de los cotos privados y federativos de caza de Castilla y León, en materia de precintado del lobo, de normas para el precintado en cacerías colectiva -posibilitando el transporte de las piezas abatidas hasta la junta de carnes- y de unificación de plazos para la remisión de resultados